jueves, octubre 09, 2008

carta abierta a todos quienes forman parte de las asociaciones de padres y madres separados

Generalmente, salvo raras excepciones, quienes acuden a las asociaciones existentes a lo largo y ancho del territorio español, incluidas las islas (no me olvido de las islas) para asociarse o arrimar el hombro; suelen hacerlo "con la intención de solucionar su problema personal"… (¡Ojo! Nada más lejos de mi intención que  decir que esto no es legítimo…)

Algunos, cuando leáis esto, os preguntaréis qué a cuento de qué nos viene Carlos Caldito con este asunto….

Pues muy sencillo, a mi entender, ésta es la clave de que el grado de organización que tenemos sea escaso, o nulo, o casi inexistente… No nos engañemos, apenas tenemos organización. Esta es la causa de que no sepamos rentabilizar las acciones que emprendemos, sacarles provecho "mediático" y de todo tipo, crecer en número de asociados, avanzar hacia los objetivos que supuestamente todos tenemos: Reforma de las actuales leyes que repercuten en la crianza y la educación de nuestros hijos, tras el divorcio; la Custodia Compartida y la Mediación Familiar Obligatoria… (aparte de prestar asesoramiento y apoyo a quienes acuden a nosotros)

Vuelvo al principio: la gente acude a las asociaciones ya existentes para solucionar su problema personal, y si descubre que no existe ninguna asociación en su lugar de residencia,  crea una asociación…

Por ello, en España hay una enorme cantidad de siglas, rara es la provincia donde no se haya legalizado alguna "marca comercial" con el nombre de Asociación de Padres de Familia…. O algo semejante… La gente que las pone en marcha invierte dinero, esfuerzos, tiempo, energías… (También algunas personas han logrado convencer a las autoridades de su "comunidad autónoma" o al gobierno local, para que les den alguna ayudita, o sea "subvenciones"…) Unos "se queman", otros "rehacen su vida", o solucionan parcialmente o del todo "su problema"… Las siglas siguen, y las organizaciones –generalmente "unipersonales"- desaparecen… Bueno, algunas como el río que pasa por mi ciudad (Guadiana) vuelven a reaparecer…

Seguro que a todos se os ocurre preguntarme ¿y tú por qué acudiste o montaste una/tu asociación? Pues, para qué os voy a mentir, ¡Por la misma causa que los demás! Por supuesto…

Pero a estas alturas (tras casi ocho años) sí tengo claro que en mí, y también en otras personas (pocas, intuyo) al cabo del tiempo se produjo un cierto "cambio": a medida que entraba en contacto con otras personas, fui descubriendo que "mi problema era insignificante, comparado con el de los que acudían a mi en busca de consejo, ayuda, asesoramiento, o para llorar sobre mi hombro"… incluso llegué a la conclusión de que ¡"hasta me podía sentir afortunado con lo que yo tengo"! pues pocas son las personas que tienen la posibilidad de ver a sus hijos, mientras yo veo a mi hija tres veces por semana (aparte de los fines de semana alternos, mes en verano, vacaciones de semana santa y navidad…) y hasta tengo "el privilegio" de llevarla dos veces por mes al colegio… Tal vez "mi situación personal" me dé otra visión de "nuestra lucha"…

Amigos míos, no nos engañemos, las prioridades son las prioridades;  y el que más y el que menos lo que desea (y cuanto antes mejor, con urgencia extrema, con vehemencia… y lo demás le importa un bledo) es "solucionar su problema". Por eso, entre otras cosas (ya hablaremos de ellas) la gente es reacia a "acatar con un mínimo de disciplina" acuerdos colectivos o de grupo, por eso cada cual tiende a actuar por su cuenta, "de manera autónoma", por ello ninguna "plataforma", "federación", "confederación", o lo que sea, llega a consolidarse, a prosperar y a perdurar. Por eso, de vez en cuando se organizan "conspiraciones, intentos de golpes de estado…"

Otra cuestión, importante en mi humilde opinión, es la escasa experiencia de organización y de lucha. La mayoría de la gente suele ser la primera vez que se ven en la necesidad de organizarse, de emprender acciones, de reivindicar, de luchar contra "el sistema", de "presionar" a los que tienen capacidad de decidir sobre nuestras vidas y las de nuestros hijos… También es la primera vez en su vida (o casi la primera) en la que se ven en la necesidad de elaborar planes, estrategias, tácticas… llegar a acuerdos con otras personas, participar en asambleas, "dinámicas de grupo", etc. Todo lo que cuento, no se aprende de la noche a la mañana, de un día para otro; a algunos nos ha supuesto toda una vida, algunos tenemos experiencia de organización y de lucha por haber participado desde que tenemos uso de razón, en asociaciones vecinales, sindicatos, partidos políticos, asociaciones culturales, deportivas, o de ocio, pero de forma activa, no como simples afiliados….

No pretendo decir, ni mucho menos, que nos dejéis hacer, o decidir u organizar a los "expertos"; o algo parecido… ¡Ni se os ocurra pensar tal cosa!!!

 Sólo pretendo deciros que una organización no se logra con improvisaciones, de un día para otro, a golpe de voluntarismo, de muy buenas intenciones, con urgencias, con prisas, y mucho menos con rencillas constantes, tratando de imponer opiniones, pasándose por la entrepierna lo que los demás opinen o acuerden, etc.

Una organización implica una planificación previa, serena, pensada con el tiempo que sea necesario, y sobre todo un compromiso claro, "sin peros" con el grupo, y la aceptación plena de que no todo el mundo sabe de todo,  y que cada cual puede aportar lo quiera y esté dispuesto (según sus posibilidades y capacitación) y que unos sirven para soldados y todos  no pueden ser generales ni estrategas…

            Permitidme que os diga que, mientras no avancemos en la dirección que apunto, está de más intentar organizar "macromanifestaciones" y cosas por el estilo (por supuesto, el que no se consuela es porque no quieres…)

¿Alguien se ha planteado que es casi imposible tratar de movilizar a la gente, si no tenemos capacidad de movilización? ¿Alguien se ha preguntado por qué apenas se organizan manifestaciones en España? Pues muy sencillo, porque apenas nadie sabe cómo arrastrar a la gente a las manifestaciones. Una prueba de ello es que a las manifestaciones del primero de mayo, apenas acuden más que los "dirigentes" de los sindicatos y los "liberados" –que acuden por obligación, no lo olvidemos-

Quienes organizan manifestaciones cuentan con medios, con dinero (sobre todo dinero) y llevan a la gente con el autobús y el bocata incluido; si no es así, no se comen una rosca…

Diréis ¿Entonces, dejamos de organizar manifestaciones? Pues a lo mejor se trata de no organizar ninguna, mientras no seamos capaces de arrastrar a más de 500 personas… Aunque luego les contemos a los medios de comunicación que nos hemos juntado 5000.

Es hora de pensar en que existen otras formas de actuación, otras estrategias, que posiblemente sean más eficaces. Si no, nadie nos va a tomar en serio.

Dentro de pocos días presentaremos el partido político CUSTODIA COMPARTIDA, PADRES Y MADRES EN IGUALDAD, ante los medios de comunicación. Luego, antes de que finalice 2008 convocaremos un congreso constituyente. Puede ser el momento de debatir-elaborar planes, estrategias, etc. Pienso que merece la pena, si no, seguiremos tropezando en las mismas piedras y cometiendo los mismos errores que hasta ahora…

Salud y Custodia Compartida.

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